A consecuencia de la pandemia, muchas novias han optado por ramos de flores preservadas en lugar de los de flores naturales. Al ofrecer una mayor conservación que los tradicionales, los novios no tienen que afrontar un nuevo gasto si la boda es cancelada o aplazada y el mismo ramo vale para la ceremonia de boda y, si así lo desea la pareja, para las fotografías de posboda. Además, constituyen un recuerdo muy emotivo…
¿Qué son las flores preservadas?
Las flores preservadas no son flores secas. Son flores naturales que, después de cortarse, son sometidas a un procedimiento de deshidratación que sustituye su savia y agua por un compuesto con base de glicerina.
Con este proceso, las flores preservadas tienen la misma apariencia que las naturales: conservan la misma textura, color y olor.
No todas las flores pueden ser preservadas. Por ello es habitual que, en los ramos de novia, se entremezclen este tipo de flores con flores secas. Lo que sí admiten ambas es el tinte, con lo que es posible elaborar ramos muy vistosos, combinando un amplio abanico de colores.
¿Cuánto duran las flores preservadas
Según el tipo de flor y de sus cuidados, las flores preservadas se mantienen inalteradas entre 3 y 5 años.
Si estás organizando tu boda puedes plantearte esta opción para tu ramo de novia. Además, gracias a las amplias posibilidades en composiciones y color, son ramos que dan mucho ‘juego’ en las fotografías de tu boda (y en las fotografías de tu posboda, si te decides a realizarlas). Si buscas un fotográfo para tu boda, no dudes en contactar con nosotros».