A Guillermo y Hellen los conocí, a diferencia de otras parejas, poco tiempo antes de su boda, aunque he de decir que eso fue lo de menos, porque desde el primer momento, fue como si nos conociéramos de mucho antes, así que para mí, como fotógrafo de boda, también es un reto personal conectar con una pareja con algo menos de antelación, pero con ellos fue instantáneo.
A mediados del mes de septiembre tuvo lugar su enlace en la Iglesia de San Gerardo Maria Mayela, en el popular barrio madrileño de Aluche; y desde allí nos desplazamos a la localidad de Leganes, al sur de Madrid. Aunque no sin antes realizar una pequeña pero intensa parada para realizar la sesión de fotografía de recién casados, en un pequeño lago situado en el barrio de la Fortuna, también en Leganés.
Guillermo y Hellen olvidaron desde el primer instante se olvidaron de que yo estaba allí, junto a ellos, inmortalizando con mis cámaras cada mirada, cada gesto, cada caricia, cada beso y muestra de complicidad entre vosotros. Como puedo sentir en el resultado de las fotografías, que son totalmente naturales, sencillas y espontáneas, es como si jamás hubiera estado allí, pero sí estuve, y así como disfruté en su boda, podéis hacerlo ahora vosotros viendo éstas fotografías.
La celebración y posterior fiesta fue en los salones Palacio Gran Avenida, sito en la Avenida de Fuenlabrada,9 de Leganes, como mencioné anteriormente.
Sólo quiero daros las gracias, Guillermo y Hellen por vuestro trato hacia mi persona, tanto laboral como personalmente, y desearos toda la felicidad del mundo junto a vuestra pequeña.
Os desea lo mejor y por muchos años vuestro fotógrafo de boda, Un fuerte abrazo, Bernardo.
